Microcosmos

 

Bajo las estrellas espero. Son muchas, y tintinean en una especie de espiral cada vez más estrecha y lejana. La galaxia es así, un remolino de luces de estrellas girando en un abismal espacio oscuro que acaba en un centro, donde dicen, que está la mayor y más grande de ellas.

Existen millones, y cada una diferente, pero todas contienen básicamente lo mismo, vida.

El mio es verde, llena de luz y esferas brillantes. Su inmensidad es abrumadora, una fuerza de espiritualidad y paz. Y yo aquí en su base estoy, bajo su figura, esperando el momento envuelto de ilusión y guardando el amor que han confiado en mi.

–¡Mira mama! ¡Un regalo!

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